viernes, 17 de febrero de 2017

TEMA 1: El Incio de la Edad Media









   La división del Imperio en dos mitades, a la muerte de Teodosio, no puso fin a los problemas, sobre todo en la parte occidental. Burgundios, Alanos, Suevos y Vándalos campaban a sus anchas por el Imperio y llegaron hasta Hispania y el Norte de África.
Los dominios occidentales de Roma quedaron reducidos a Italia y una estrecha franja al sur de la Galia. Los sucesores de Honorio fueron monarcas títeres, niños manejados a su antojo por los fuertes generales bárbaros, los únicos capaces de controlar a las tropas, formadas ya mayoritariamente por extranjeros.
El año 402, los godos invadieron Italia, y obligaron a los emperadores a trasladarse a Rávena, rodeada de pantanos y más segura que Roma y Milán. Mientras el emperador permanecía, impotente, recluido en esta ciudad portuaria del norte, contemplando cómo su imperio se desmoronaba, los godos saqueaban y quemaban las ciudades de Italia a su antojo.

Lectura 2: La estrella de la mañana



  
La vida de Joma, un chico que aspira a ser ilustrador, es un infierno: su padre está en la cárcel y el actual compañero de su madre es alcohólico. La noche en que conoce a Beatriz, una muchacha de posición desahogada, cruza los límites de su mundo. El amor entre los dos parece un imposible, pero se hace realidad, y la pareja debe enfrentarse a la oposición de su entorno. No ven otra alternativa que escapar de una sociedad que no los acepta. La huida es la clave que decide su futuro, con una única y débil esperanza: la estrella de la mañana que, al nacer el día, les indica el camino. Beatriz se pone enferma y Joma roba dinero para comprarle medicinas. Pronto los detiene la Guardia Civil. El padre de la chica impide a Joma que vuelva a ver a su hija.